


¿Como será la nieve?


Mientras mi madre se prepara, yo la espero con impaciencia, pues estoy deseando salir a la calle, y... que me suba al coche!
¡Que maravilloso es salir a la calle y recibir la luz del Sol, los sonidos, los olores...!
Luego de compras con mi madre y como la farmacia le coge al paso...,
!¿A ver lo que pesas, Pablo?!
¡Pues nada menos que 5,320!
Ya me parecía a mi que me estaba apretando la ropa; pero no pienso ponerme a dieta, pues como he dicho antes no puedo desaprovechar la despensa de mi madre.
Los abuelos ya comentan que, a lo mejor..., algún día..., puede surgir algo entre los dos. A mi no me importaría, pues la zagala es muy guapa, como bien podéis comprobar en la foto superior.
Lo que pasa que todavía somos muy jóvenes... ¿Pero quién sabe lo que puede pasar dentro de 18 ó 20 años?
Y para festejar LOS REYES, un año más, hemos preparado una fiesta gastronómica, que según tengo entendido por los rumores que me llegan, se recuerda durante todo el año y se espera con impaciencia la del siguiente. Yo, como este año soy el novato, dicto a mi abuelo lo que con mi corta edad (34 días) medio-casi entiendo. Pero imagino que si el año que viene se celebra LA FIESTA, será especial, pues yo ya seré mayor (399 días), y la disfrutare "atope" uniéndome junto con mi hermano, al resto de la pandilla de primos... ¡La que "vamos a liar", como nos dejen!
Haciendo entrega a los primos de los regalos dejados por Los Reyes, la noche anterior. Rocío, Manuel, Jaime, Laura y Álvaro, los recogen con entusiasmo.
Los del centro de la imagen, no son delincuentes, aunque lo parezca. Realmente son los padres de Manuel y Álvaro.
Como éramos un montón, la foto oficial se hizo por sexos. Aquí las "chicas", que en la fila de arriba y de izquierda a derecha son: Encarni (M), Agus, Cruz, mami, Encarni (S), tita Ana, y la abuela Eli (con el "poncho" que le han dejado Los Reyes, en casa de los primos). En la de abajo: Laura, Rocío, Rosa (VL), Inma, Rosa (VB) y Lola.
... Y aquí, "los chicos". Atrás y de izquierda a derecha: Antonio Vera y el tito Domingo (con la intención de pasar desapercibidos..., ¿o todo lo contrario?), Maxi, Manolo, Juan (preparado para participar en "humor amarillo"), Antonio Sáez y papá. Abajo, el abuelo Juando (radiante de sol y presumiendo del chaquetón que Los Reyes le han dejado en casa de los primos ), Manuel, Jaime y Álvaro.
¡¡¡... pero que ha pasado conmigo..., soy pequeño, pero no tan insignificante como para olvidarse de mi!!!
¿Que es ésto...? parece preguntarse atónito mi hermano ¡Tranqui... Alberto, que seguro que hay más cosas!
¡Andaaaaa... esto si que es grande hermano. Además el trailers viene cargado de coches...!
¡Con lo que a ti te gustan!
Yo también pienso divertirme mientras tu les arreas choques y vueltas de campana.
Como te has quedado "traspuesto" y has cerrado los ojos, no has podido apreciar la cara de asombro del "primo" Jesús, pues el paquetazo lo habían dejado Los Reyes en su casa y él vino a traértelo como paje voluntario de los Magos de Oriente.
¡Lo que faltaba tío... UN AVIÓN!
Anda que no podrás quejarte, se ve que te has portado bien, pues los regalos te han llovido este año. Yo como soy tan joven, no he podido ser bueno este año como tú, si acaso... ¡solo un mes, o sea..., toda mi vida hasta ahora!
Mirad que cara de sorpresa se me ha quedado ante tantas emociones.
Es que no me lo puedo creer la cantidad de cosas que nos han traído Papá Noel y Los Reyes, tanto en nuestra casa como en la de amigos y familia.
El próximo año en vez de contemplar desde mi columpio, como juega Alberto, pienso participar junto a él en este festival juguetero.
¡Si señor..., como un par..., de hermanos!
Cuando abrió la monumental caja de pinturas, se quedó más sorprendido aún... ¡Cuantos colores en un solo estuche!
Aunque después se lleve las manos a la cabeza, sorprendido por el desorden que ha causado en un instante.
Pero el regalo estrella de Papa Noel fue... ¡Rayo McQueen!!!! El protagonista de Cars... ¡La "peli" favorita de Alberto!
Este regalo si que le cogió por sorpresa..., su coche favorito en el cine..., ahora en sus manos. Además habla y también mueve la boca y los ojos... ¡Demasiadas emociones para una sola noche!