
Por fin cuando Mayo está a punto de acabar, estamos disfrutando de unos buenos días, que como es natural los aprovechamos para hacer gasto de piscina.
Para Elena, el domingo, fue su su primer baño "a lo grande". Al principio estaba algo asustada por la cantidad de agua que veía, pero muy pronto se
ha hecho al medio y al parecer le gusta tanto o más que la bañera.
Mi mamá nos grabó un vídeo que cuelgo aquí, recomendando, como siempre, bajar el sonido.


Vaya susto que se lleva Elena cuando la salpica el agua que ella misma ha levantado con las manos. Yo, la observo divertido, mientras papá le presta auxilio.


Así de feliz se encontraba Elena el día de su primer baño en la piscina. Y aunque la llegada del buen tiempo se demora, este verano nos vamos a pegar tal jartá de baños, que competiremos con los renacuajos.